Ayer se aprobaron, en la Cámara de Diputados, préstamos por 1,242 millones de dólares. Los motivos de los empréstitos parecen muy válidos pero siguen siendo 1242 millones de dólares que pagará alguna generación de dominicanos y dominicanas. Son 6 nuevos préstamos serían para seguimiento de la construcción del Metro de Santo Domingo, la construcción de la presa Monte Grande y el mejoramiento de la eficiencia energética. Quienes como yo no sabemos nada de economía, valoramos la deuda del Estado Dominicano con el mismo rasero que la deuda personal o una deuda de empresa. Toda persona o empresa tiene un límite de deuda manejable, un tope que en el caso personal y empresarial establecen los asesores financieros quienes definen nuestra capacidad de endeudamiento en función de nuestra capacidad de pago. Por eso existe el dicho popular “Debe hasta la camisa” Yo no sé si la República Dominicana debe hasta la camisa pero debe estar cerca de deber hasta la ropa interior y lo más grave es que el rancho sigue ardiendo y el partido oficial aprendió a imponer la mayoría mecánica que no funciona cuando se trata de derechos ciudadanos pero es un éxito cuando se trata de los préstamos. Un informe publicado por el Centro Regional de Estrategias Económicas Sostenibles sobre la evolución de la deuda dominicana estableció que a abril de 2023 la deuda pública consolidada de República Dominicana (incluyendo deuda intergubernamental) ascendió a US$74,282.6 millones, de los cuales US$54,721.2 millones correspondían a la deuda del SPNF y los restantes US$19,561.4 millones provenían de los pasivos del BCRD. Como porcentaje del PIB, la deuda del SPNF representó un 44.7% y la del BCRD representó un 16.0%; ubicando así la deuda pública consolidada en 60.7% del PIB en abril de 2023. El mismo informe indica que aunque la valoración de la deuda de los estados se hace en función del Producto Interno Bruto que para definirlo simplemente es la suma de toda la riqueza que produce un país, la verdad es que la deuda se paga con el presupuesto que está integrado por los ingresos del estado y en el caso de RD más deuda. Según el citado informe 29 de cada cien pesos consignados en el presupuesto de este año se dedicaron al pago de intereses de deudas viejas pero por lo que vemos el rancho sigue ardiendo y parece que seguiremos endeudándonos para pagar deudas. Como yo soy una lega, sé que hoy aparecerán varios facultos que explicarán que la capacidad de endeudamiento del Estado es ilimitada y que me pondrán los ejemplos de la deuda de Japón y Estados Unidos. Pero ni esto es Japón y hasta donde yo sé todo lo que se debe se paga.