La Santa Misa del Domingo II del Tiempo Ordinario se llevó a cabo con solemnidad y devoción. Durante la celebración, se destacaron los temas de la fe y la vocación. El sacerdote enfatizó la importancia de confiar en Dios y seguir su llamado en nuestras vidas. Los fieles participaron activamente en la liturgia, rezando y cantando con fervor. La homilía se centró en la necesidad de discernir nuestra vocación y responder con generosidad. En general, la misa fue un momento de encuentro espiritual y reflexión para la comunidad.