Las recientes lluvias e inundaciones en la República Dominicana han generado debate en los medios de comunicación y redes sociales sobre las responsabilidades de la tragedia ocurrida en la 27 de febrero con Máximo Gómez, que dejó nueve muertos. Se cuestiona el interés selectivo de los opinadores, ya que otros 12 o 19 fallecidos parecen no despertar su atención. Se han difundido portadas y páginas de periódicos que muestran las explicaciones técnicas del CODIA y sus recomendaciones para subsanar las fallas. A lo largo de 24 años y cuatro administraciones públicas, no se han implementado los planes propuestos para enfrentar este tipo de situaciones. Además, se destaca la falta de un sistema de drenaje pluvial en una ciudad de 4 millones de habitantes. A esto se suma el crecimiento vertical de la ciudad, con edificios que no siguen un plan de expansión de servicios y que afectan las aguadas naturales. Recientemente, el presidente Luis Abinader anunció una nueva propuesta para intervenir el drenaje de la capital. Se espera que el gobierno tome medidas concretas para abordar esta problemática.