Una de las características de las marchas verdes era que además de la consigna fundamental del movimiento social de lucha contra la corrupción y la impunidad y recuperación del dinero robado en cada provincia había demandas particulares. El equipo de organización de la marcha se cuidaba de evitar que los partidos o grupos políticos no intentarán capitalizar el movimiento social y evitamos que aparecieran banderas que no fueran verde u otros elementos extraños. La marcha de Bonao demandó el sometimiento del entonces senador Felix Nova. La otra demanda de Bonao fue justicia para Thalía. Por eso en Bonao además de la bandera verde hubo un bloque de banderas color rosa, que fue acompañado y permitido por los verdes, ante el dolor de una familia y amigos que tenían un año demandando justicia por el asesinato de una joven con nueve meses de embarazo que recibió mas de 20 puñadas y cuya investigación no le había interesado al ministerio público. Ayer por fin hubo condenas de 30 y 20 años contra los asesinos de Thalía. Llamo la atención sobre este caso para de paso responder una pregunta que anteanoche me hizo MAriasela Alvarez. Qué impacto tuvo el esquema corrupto impuesto por Yanalan Rodriguez y el PLD en el ministerio público? La Respuesta está en el caso Thalía. Para mi y para un grupo de periodistas fue persecución y acoso, para los corruptos impunidad preconcebida y para gente común falta de justicia. Ayer fue un día interesante para la justicia dominicana. No solo hubo justicia para esta joven asesinada días antes del parto. Ayer el ministerio público presentó las pruebas contra el ex director de la OMSA en el caso unificado de corrupción en esa institución y el asesinato de Yuniol Ramírez; ayer también una jueza le dijo al urbano Rochy RD usted no está aquí por famoso sino por violar la ley. Los cambios en el ministerio público han sido pequeñitos. El presidente de la República solo designó por decreto a la procuradora y seis adjuntos. La procuradora designó a otros seis adjuntos. El resto del aparato está regido por el estatuto ministerio público y que bueno que aunque permeada por el concurso de yanalan hay una institucionalidad que se respeta. Nosotros defendemos eso. Lo que hace evidente el caso de Thalía y el caso de la OMSA es que cuando los fiscales trabajan la gente común, la de a pie recibe justicia. Hubo muchos casos Thalía, si no lo creen pregúntele al viceministro de turismo que el año pasado fue condenado por la violación de una turista canadiense y cuyo expediente rodó y rodó sin que nadie se ocupara del caso. El día de ayer fue para celebrar y no solo en Bonao.