En febrero de 2020, el pleno de la Junta Central Electoral, a la cabeza de Julio César Castaños Guzmán, emitió la Resolución 18-20, en la que rechazaba la candidatura a la presidencia de República Dominicana, para el periodo 2020-2024, de Luis José Ramfis Rafael Domínguez Trujillo, conocido como Ramfis Trujillo. En la resolución, el órgano electoral establecía que Ramfis Trujillo no había renunciado a su nacionalidad de nacimiento ni posteriormente había residido en el país durante los diez años previos a la postulación del cargo que aspiraba, razón por la cual y al tenor de lo dispuesto en el párrafo del artículo 20 de la Constitución de la República, no procedía “admitir su candidatura a la Presidencia de la República. La resolución citada establece que el "señor Luis José Ramfis Rafael Domínguez Trujillo, nació el 22 de mayo de 1970, en Manhattan, New York, Estados Unidos de América, e hizo la transcripción de su acta originaria de nacimiento por ante el Registro Civil Dominicano en fecha 18 de mayo de 201 6, luego de lo cual en fecha 23 de mayo de 2016, obtuvo su cédula de identidad y electoral”. La Resolución indicó que “para determinar el punto de partida legal para fines de establecer la residencia en el país del señor Luis José Ramfis Rafael Domínguez Trujillo, lo correcto es asumir la fecha de expedición de su cédula de Identidad y Electoral, como punto de partida de la asunción de la nacionalidad dominicana por origen que, como señalamos anteriormente, fue el 23 de mayo de 2016, lo que evidencia que todavía no llega a los diez años”. Eso no ha cambiado ni lo cambia el hecho de la JCE haya aprobado su partido político dado que en la ocasión pasada era candidato del Partido Nacional Voluntad Ciudadana que durante décadas fue el Partido de los Veteranos y Civiles. Nos parece que hay una confusión en algunas personas que no entienden la valoración de la JCE en este caso. La junta aceptó la documentación de una organización política que puede llevar como candidato a Juaniquito el tiznao si cumple con la norma. La Junta está llamada a cumplir la ley electoral y de partidos políticos que en este caso no incluye una candidatura aunque se puede pensar que es así. En palabras sencillas que se apruebe un partido no significa que se valide una posible candidatura. Ranfis no es un proyecto político sino económico. Su interés por el dinero es conocido desde antes de la mayoría de edad cuando fue instruido por violar la ley de cheques en su país que es Estados Unidos. Su primer acto conocido en RD tuvo que ver con un negocio en el entonces BNV que le costó al estado 5 millones de dólares. En el pasado proceso en que no pudo ser candidato el señor Trujillo buscó dinero entre las comunidades judías de los Estados Unidos reclamando el papel de su abuelo en favor de los judios errantes de la segunda guerra mundial. Rafael Trujillo cobró el favor en dólares en los años 40 y el nieto quiso seguir cobrando lo que motivó una aclaración del Consejo de Rabinos de Las Américas en el sentido de que no había ofrecido ningún tipo de apoyo al nieto del dictador. En el proceso electoral del 2020 Ranfis captó miles de dólares entre los dominicanos de menor nivel educativo en los Estados Unidos. Fracasó cuando intentó captar gente de más alto nivel que casi siempre es la más educada. Mantener la confusión es el negocio de este momento. Con una página de Patreon y los dólares de los mismos donantes es posible que reúna un par de dólares rendidos.