El ultranacionalismo dominicano implica cierto grado de estupidez. No se pude ser crítico hacia la sociedad, no se puede señalar los problemas porque eso daña la imagen. Los gobiernos están felices con ese pensamiento porque si no hay problemas no hay que nada que resolver. Quizá no es el mejor día para tratar el tema pero como no hay comedera hasta mañana hoy tenemos los datos para decir sin duda que este es un país bañado en mierda. El conservadurismo que ha caracterizado la sociedad dominicana nos ha acostumbrado a ocultar la basura bajo la alfombra y como hemos dicho en reiteradas ocasiones aquí el problema no es que la cosa pase sino que se sepa. En octubre del año pasado cuando el ingeniero Gilberto Reinoso dijo que la playa de Boca Chica estaba altamente contaminada por materia fecal y especialmente echerichia coli se armó un avispero que terminó con que alguien dijo que no era verdad y todos contentos. El propio Reinoso uno de los técnicos más reputados del país en el área de agua dijo que solo para sanear las playas del este hasta Boca Chica se necesitaba una inversión de miles de millones de dólares. El pacto nacional de agua previsto para 30 años implicaría una inversión superior a los 8 mil millones de dólares. El escarceo contra el ingeniero Reinoso vino de quienes entendían que sus declaraciones fundamentadas en estudios científicos le hacían daño a la industria turística y en eso tienen razón. Pero no deja de ser verdad. Hoy cuando la encuesta nacional de hogares ratifica que el 80 por cientos de los desechos humanos de la República Dominicana termina sin ningún tipo de tratamiento hay que concluir que este es un país bañado en mierda. Para hacerse una idea de lo que significa piensa en los desechos de 8 de cada diez hogares de su vecindario y hacia dónde va. Todavía el 15% por ciento de los ciudadanos no dispone de un inodoro de uso privado y eso implica las letrinas y los inodoros de uso colectivo comunes en las cuarterías urbanas. Quienes se ofendieron e hicieron una alharaca en las redes sociales porque la hija de una presentadora de televisión en los Estados Unidos anunció que venía a RD a construir letrinas deben ver estos datos. Ese ruido como el provocado por la contaminación de Boca Chica duró una semana y ya se olvidó. Mientras tanto seguimos nadando en la misma cosa. Los 50 años de crecimiento no han servido para atender lo que no se ve. Por eso seguimos teniendo la peor educación del mundo y un sistema de salud que no atiende a las necesidades de la gente. Escucho en los últimos días, a propósito de la presencia del Cóler, a autoridades pedirle a la gente de La Zurza que no use el agua de rio Isabela que ellos mismos contaminan. Y una tiene que preguntarse y cuál sugiere que usen. Quizá no era el mejor día para tratar el tema pero si la Navidad es para reflexión además de fiesta no hay mejor tema que este. Ayer, la tal Rosa me decía que los pueblos se catalogan por los cementerios, los mercados y la forma en que disponen sus residuos. Aquí andamos mal en las tres cosas y solo nos han llegado los edificios y los carros del NY Chiquito.