El gobierno de Luis Abinader retiró ayer el proyecto de ley de trata explotación y tráfico ilícito de migrantes luego de una semana de presión de los sectores ultra nacionalistas que se inició con una publicación del Listín Diario el pasado lunes. Es el sexto recule legislativo de Abinader en dos años y medio. El primero fue su primer proyecto de presupuesto. La oposición política se ha dado cuenta de la flaqueza del gobierno para defender sus puntos de vista y se ha dado y parece que se seguirá dando gusto con la quiebra de la voluntad oficialista cuya política de comunicación de engrasar a las bocinas moradas no ha dado resultado. De 95 artículos de la ley de marras uno solo, el 63, es sujeto de cuestionamiento. Ese articulo establece las medidas de asistencia a las victimas de trata e incluye proporcionar alojamiento y protección. Además la no devolución a sus países de origen de las victimas de persecución política. El Lístin que con frecuencia coincide con los planteamientos de Leonel Fernández inició la campaña pero Leonel tuvo las palabras de culminación ayer cuando “exigió” el retiro del proyecto cosa que hizo el gobierno horas después. Aquí en Sin Maquillaje apenas nos habíamos referido al tema porque no nos gusta montarnos en la guagua que otro maneja pero dada el recule de Abinader hay que por lo menos explicar el caso. El proyecto de ley ordena una serie de normativas asociadas a convenciones internacionales y el propio ordenamiento jurídico local incluida la ley promulgada por el propio Fernández en el 2006 que establece la protección a las víctimas de trata. ¿Qué dice el protocolo del 2006 promulgado por Fernández? En su artículo 6 sostiene: que cada Estado Parte considerará la posibilidad de aplicar medidas destinadas a prever la recuperación física, psicológica y social de las víctimas de la trata de personas, incluso, cuando proceda, en cooperación con organizaciones no gubernamentales, otras organizaciones pertinentes y demás sectores de la sociedad civil, y en particular mediante el suministro de: alojamiento adecuado; asesoramiento e información, en particular con respecto a sus derechos jurídicos, en un idioma que las víctimas de la trata de personas puedan comprender. También, establece ofrecer asistencia médica, psicológica y material, y oportunidades de empleo, educación y capacitación. En cuanto a la permanencia temporal, sostiene en su artículo 7 que: “cada Estado Parte considerará la posibilidad de adoptar medidas legislativas u otras medidas apropiadas que permitan a las víctimas de la trata de personas permanecer en su territorio, temporal o permanentemente, cuando proceda” El articulo 63 del proyecto que acaba de retirar Abinader dice lo mismo, Leonel Fernández sufre de Alzheimer y muchos medios no tienen archivos para verificar sus propias publicaciones. El público desinformado no tiene porqué conocer más allá la hipersensibilidad ante la palabra Haití. Ordenar la casa que es nuestro país dará mucha brega cuando desde quien tiene que impulsar ese orden cede con tanta facilidad a las presiones de un grupito que manipula a las mayorías. El gobierno lo sabe pero es pendejo, no hay otra calificación es un gobierno pendejo.