En un audio que circula profusamente el ex director de la OISOE, Francisco Pagán cuenta como el empresario Juan Ramón Gomez Díaz llega a su despacho con seis cheques de 25 millones de pesos como aportes a la campaña electoral. Pagán cuenta como devolvió una parte del dinero y entregó la tercera parte unos 50 millones de pesos. Para una lega financiera como yo 50 millones es mucho dinero y 150 es mucho más. No hay manera de dejar de sorprenderse ante la práctica política dominicana. En diciembre de 2020, el también imputado en el caso Antipulpo, Aquiles Christopher Sánchez, aseguró en estrado, que al llegar a la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado, encontró contratos a favor de las empresas Andrés y Camilan, propiedad del empresario Gómez Díaz, por hasta RD$ 21,000 millones de pesos. Un cálculo simple indica que 150 millones de pesos es menos del uno por ciento de 21 mil millones. El uno por ciento es 210. El señor Gómez Díaz aportó alrededor de 0.70% del monto contratado por el estado a sus empresas para la campaña electoral del partido de la liberación Dominicana. Técnicamente no debió aportar nada. Porque hacer negocios con el estado es un derecho siempre y cuando se cumpla con las leyes y los contratos respeten las normas. No sé como se obtuvieron los contratos ni dónde se ejecutaron las obras pero 21 mil millones de pesos es mucho dinero. Cuando una escucha hablar de dinero en esos montos y aportes de campaña en otros tantos entiende porqué los honorables congresistas no quieren establecer topes de gasto a la campaña electoral. Aunque el dinero de campaña se maneja de boca siempre deja un rastro y los montos son tan altos que no se pueden manejar en efectivo. Piensen ustedes en 150 millones en fundas negras. La JCE intentó organizar el proceso electoral con una reducción mínima de los gastos de campaña que en RD son más altos que en las grandes economías del mundo. Pero los partidos con presencia en el congreso no quieren eso. Danilo Medina dijo el domingo que el PLD volverá al poder por la voluntad de sus militantes. Es evidente que olvidó su lamento de septiembre del 2020 cuando dijo que los miembros su partido no se movía sin logística y que por tanto no merecían seguir en el poder. Invertir el 0.70 de tus contratos en campaña electoral para garantizar miles de millones es simplemente una gran idea de un emprendedor quizá una debe preguntarse cuantos Gómez Díaz hay por ahí y cuantos nos han costado.