Las normas y regulaciones anunciadas ayer por la JCE con la prohibición expresa de utilizar la figura del presidente de la República, que también es candidato, en la promoción de las ejecutorias y actos del gobierno desnuda a un partido que no ha invertido ni tiempo ni recursos en su propia construcción. El PRM nació con forceps, luego que el control del PLD y su socio sobre el tribunal superior electoral le diera ganancia de causa más de 30 veces a Miguel Vargas Maldonado. Vargas se aferró con tal fuerza al “jacho prendío” del PRD que lo apagó. Nacido bajo presión, dos años antes de las elecciones del 16 el PRM resultó en una mezcla de viejos dirigentes cansados por 16 años consecutivos de oposición y una generación de popys, incluido el propio Abinader, que en su mayoría eran hijos de otros dirigentes o parte de familias tradicionales perredistas con ciertos privilegios. Nadie pensó en el 2016 que el PLD sería barrido cuatro años después y que la ola anticorrupción movilizada por la MV entre el 17 y el 18, la ira colectiva provocada por la suspensión de las elecciones municipales en el 2020 le darían la presidencial a Abinader y la mayoría congresual y municipal al PRM. Pero pasó. Abinader sin duda ha tenido una gestión exitosa, a pesar de que tomó el gobierno en medio de la crisis covid. Nadie cuestiona las encuestas que le dan hasta 64% y los dos partidos de oposición están tan debilitados que no llegan al 30%. Pero… el PRM no funciona como partido sino como gobierno. José Ignacio Paliza anda en una ambulancia recogiendo los tránsfugas heridos como si el asunto se tratara de ganar por sobrepeso. Luis Abinader es ahora el único activo político del PRM, el resto de los dirigentes llegará a posiciones por inercia. Nadie sobresale, nadie plantea una posición, recogerán las sobras de la comida presidencial con posiciones electivas menores y ninguno construye para mañana. Un partido sin tiempo para si mismo y lleno de tránsfugas cuya única convicción es buscar un pedazo del pastel del estado, es una bomba que empezará a buscar formas de explotar tan pronto pasen las elecciones.